SOCIEDAD ARGENTINA DE ESCRITORES, SECCIONAL DOLORES, S.A.D.E.D



Tal como se había anunciado, el sábado pasado se proclamaron de los ganadores del III Certamen Internacional de Sonetos, organizado por la Institución, en un acto realizado en el restó del Club Independiente.
El su transcurso, se dio lectura a los sonetos premiados y a una mención especial. y la presidente de S.A.D.E.D. Teresita Saint Esteben, leyó una emotiva carta enviada por el poeta que mereció el primer puesto, Alejandro Alagón, de Huesca, España. Es de destacar que el quinto premio, correspondió al soneto de Eduardo Moreno, argentino residente en Panamá. titulado A ABEL FLEURY, QUE DICE:

Pampero Amanecido en lontananza,
la brisa fresca y el ardor impuesto,
hacia cada emoción, en cada gesto,
lleva el canto rural de la labranza.

En insignes promesas, la templanza
lleva aplausos latentes en su arresto,
y armónicos trazados, para el puesto
de músico mayor de la Esperanza.

Milongueo de ayer, donde entre estrellas
en cien guitarras vibra sierra y llano,
o en seis sonoros hilos vibradores…

Santigua musas, de floridas huellas
en el estilo que él nombró Pampeano,
su nombre: Abel Fleury. Vive en Dolores.

Para finalizar, Susana Iturralde y Verónica Cafesse abordaron el cuento de Manuel Mujica Láinez, LA GALERA, que dio lugar a un meduloso análisis de la conducta del personaje principal Catalia Vargas, desde el punto de vista literario y de la Psicología.
Valgan como comentario final las palabras del joven poeta dolorense, Mario Cáceres:
“Hoy Mujica Lainez fue el motivo, además de los sonetos merecidamente ganadores con nombres internacionales. De eso me gusta como el mapa pierde su grandeza y los pueblos su anonimato. Pasamos a estar todos mas cerca y a ser...Usted Alejandro Alagón; Usted, Dionisio Gómez, o Usted Celia Perdigus como los amigos de tiempos inmemoriales.
Se conversó de muchas cosas además de la poesía o del cuento. Se habló del hombre, máquina al fin pero con desperfectos. Se habló de la humanidad, única especie capaz de construirse y destruirse, esta humanidad de la cual formamos parte y aunque hagamos terapia con Foucault, Barylko, Freud o transitemos todas las terapias alternativas no comprenderemos jamás que pretende.
Fue como jugar a la ruleta rusa con la mas feroz de las armas: la palabra. Pero esta vez estaba cargada de pasiones, de amores, de "misterios como Buenos Aires" de temores, y sobre todo del respeto merecido por presentes y los ausentes, todos de igual forma, arquitectos de una infinidad de mundos donde cada quien es un dios en plena labor.
Quiero agradecer a mis amigos de la SADE DOLORES por la invitación a una noche que me habilita a sostener que la palabra despierta, moviliza y libera."


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